Hay nombres con un gran significado en la industria del vino mexicano. Uno de ellos es el de Camilo Magoni, un apellido que es sinónimo de respeto gracias a su compromiso con la calidad y sus grandes aportes a la identidad vinícola de Baja California. Basta mencionar que la introducción de la variedad italiana nebbiolo y la adaptación de sus biotipos al terroir de los valles baja californianos se le debe a él durante sus años en L.A. Cetto.

A propósito de su visita a la CDMX, como parte de una estrategia de distribución de Bodegas Magoni con la firma Distribuciones Internacionales, tuvimos la oportunidad de platicar con el enólogo de origen italiano sobre sus orígenes en la viticultura, la actualidad climática que padece el Valle de Guadalupe y los proyectos a futuro de un hombre convencido de que: “Todas las cosas bien hechas se pueden hacer mejor”.

Las raíces Italianas, el primer encuentro con el vino.

El primer recuerdo que tengo del vino es el de un vino natural, el que hacía mi padre, el que nos enseñó a tomar y que muchas veces sabía a vinagre y había que agregarle un poco de agua para que lo pudieras tomar. El vino en aquel tiempo era el complemento de la mesa, se servía la comida y se ponía el vino, y a nosotros nos daban un poco de vino mezclado con agua desde niños… ¡Y aquí seguimos! Después viene la gran evolución que es donde hoy estamos.

Cuando terminé la secundaria decidí dejar la escuela, entonces mi papá me forzó a trabajar con él en la actividad agrícola que siempre tuvo, el resto de mi familia siempre se dedicó a la actividad comercial, nadie se interesó por el campo. Entonces, cuando decidí regresar a la escuela, trabajaba yo en una empresa de mucho prestigio, pero entre la ley de denominación de origen, la tradición y el dueño de la bodega supe que mi futuro era ser un topo de bodega. No iba a tener opción de experimentar, de innovar algunas cosas, porque estaba copado, fue cuando decidí emigrar y la suerte me trajo a Baja California, donde estoy encantado de la vida.

El vino da, ¿el vino también quita?

El vino me ha dado perspectiva de un desarrollo hacia adelante, es demandante como cualquier profesión, pero cuando uno se apasiona con lo que hace, el trabajo se vuelve una diversión. A mi nunca me ha pesado ir a trabajar. Creo también en la necesidad y la obligación que tiene cualquier profesionista de una formación continua, yo sigo tratando de mantenerme al día con toda la información tecnológica como de mercado para poder desarrollarme profesionalmente y discutir la problemática que se vive en otros países, porque tarde que temprano se va a reflejar también en nuestro mercado.

En mis vacaciones, sigo tratando de descubrir y conocer la región de Baja California, que es un territorio inmenso y que nos ofrece cantidades enormes de sorpresas.

Se buscan bebedores educados

Buscamos un consumidor que sea aficionado a los vinos, que busque calidad con una consistencia cualitativa garantizada y que pueda convertirse en un vino de consumo regular. Que tenga en la mente a la marca. Que sea un vino agradable, fácil de tomar y que pueda ganarse poco a poco la confianza del consumidor, ese es el objetivo.

Generar confianza a través de generar una buena relación precio calidad es lo que siempre hemos conseguido. Que el consumidor esté dispuesto a invertir y que sienta satisfacción al probar el vino y al degustarlo, que diga: ha sido una buena inversión, esa es la confianza que estamos buscando, y el consumidor al que estamos tratando de llegar.

Cambio Climático

Los cambios que estamos viviendo no son fáciles de entender ni de resolver, habrá mucho trabajo en el campo, en el viñedo, a base de riegos, de sistemas de conducción de la vid y tratando de ajustarnos con la tecnología a lo que nos está confrontando la naturaleza. No podemos hacer caso omiso, yo creo que el cambio climático es un tema universal, con grandes variaciones y con  grandes preocupaciones de todos. Tenemos que apoyarnos en el conocimiento del clima el terroir y las modificaciones climáticas que hay prácticamente a diario, conocer las variedades, para poder tener el día de mañana opciones de solución.

Hace unos días estaba platicando con personas de mi región sobre la importancia de platicar e intercambiar experiencias con personas de otras regiones para saber cómo están enfrentando ellos el tema del cambio climático. Este año, en Burdeos cosecharon el sauvignon blanc antes que nosotros en la región de Baja California, para que vean que allá también el cambio climático se está moviendo a pasos agigantados. Y no es algo que yo haya leído, sino que me lo platicó un productor de allá.

Evolución y legado

A mí me ha tocado vivir una evolución muy importante, me ha tocado participar en el desarrollo de etiquetas muy exitosas, mi aporte es que siempre he tratado de cumplir con mi responsabilidad, el éxito de una marca, de una etiqueta, no es mérito de uno nada más, es mérito de todo un equipo y de una colaboración dentro y fuera de la empresa. Si no hay una colaboración basada en una confianza absoluta no podemos llegar al éxito. También tengo una frase: “Las cosas simplemente hay que hacerlas bien, sin olvidar que todas las cosas bien hechas se pueden hacer mejor”. Ese es el objetivo.