El vino de Robert Mondavi

Cuando se tiene una visión como la de Robert Mondavi para hacer las cosas de forma diferente y trabajar incansablemente hasta lograr un producto de excelencia, es fácil inspirar a los demás y detonar un cambio. Pese a que Robert no fue un viticultor o un enólogo de profesión, conoció el negocio desde abajo, entendió las necesidades de toda la cadena de producción y supo reconocer una gran oportunidad potencial. Esa mentalidad hizo que su solo nombre pasara a la historia como sinónimo de liderazgo, calidad y excelencia en los buenos vinos norteamericanos.