El presente y el futuro del vino mexicano son femeninos. Una clara prueba de ello es el éxito de la vinícola mexicana Casta de Vinos, que de la mano de Claudia Horta y su hija Ana Sofía Castañeda, ha cosechado 46 medallas en concursos nacionales e internacionales.

Algunas de las medallas más destacadas de las winemakers mexicanas fueron las que obtuvieron en la XII edición de los Premios Internacionales Vino y Mujer celebrado los pasados 9 y 10 de mayo en Madrid, España. Para conocer más sobre esa experiencia y el éxito de Casta de Vinos, platicamos con Claudia Horta, quien nos compartió un poco sobre su forma de entender el vino y el papel de las mujeres en la industria vitivinícola mexicana.  

2019 ha sido un año de consagración para Casta de vinos Entre todas los reconocimientos que ha ganado a nivel internacional, ¿cuáles destaca especialmente?

Este año ha sido increíble, entre los reconocimientos de los que nos sentimos más orgullosas están los que conseguimos en Burdeos, Francia donde ganamos un oro y una plata, en Madrid ganamos un oro y una plata,  y en el concurso de productoras enólogas winemakers del mundo hemos ganado 4 medallas: el gran oro con Casta Tinta Petit Verdot, el oro con Casta Tinta Cabernet Sauvignon, una plata con el Casta Tinta Syrah y un oro con Flor de Roca, que es un Ruby Carbenet que hace mi hija Ana Sofía, que a sus 20 años es considerada actualmente la Winemaker mexicana más joven del mundo y que se sigue preparando estudiando una ingeniería en Ribera del Duero, en España.

Háblanos un poco de tu experiencia en losPremios Internacionales Vino y Mujer

Este concurso es por invitación y compite por regiones del mundo, en este caso competimos representando a Baja California. Entre regiones nos vamos eliminando hasta llegar a la fecha del 9 y 10 de mayo. En esta eliminatoria nos enfrentamos 62 regiones, lo interesante fue que nos enfrentamos puras mujeres que estamos haciendo vinos alrededor del mundo. En este sentido mi hija Ana Sofía y yo representamos a México como enólogas responsables.

¿A qué obedece la inquietud de medirse internacionalmente, particularmente en Europa?

En los últimos años solo hemos estado concursando en Europa, por siete años consecutivos hemos estado ganando premios año tras año en Europa, lo que comprueba la consistencia de calidad de los vinos de Baja California, que está a la par de los vinos de Europa. Nosotros no menospreciamos la calidad del vino mexicano, pero la verdad es que el estilo de vinos de Casta de Vinos es muy elaborado y con técnicas muy europeas, es por eso que nos queremos medir con los vinos de aquellas regiones, que son quienes lideran la vanguardia en cuanto a  aromas y sabores.

Estamos a punto de confirmar nuestra participación en el “International Wine Challenge” algo así como “el campeón de campeones de los vinos”, donde vamos a competir los campeones  de todos los concursos que estén avalados por la asociación internacional de la viña y la vid, que es el organismo más importante del  mundo. Creo que participar en estos concursos en los que Casta de Vinos va representando a México, no sólo a la región de Baja California, por la validez y la importancia, sube escalones a México en el escalafón mundial. En este concurso, que tiene un formato parecido a la copa del mundo de futbol, a partir del 13 de junio nos vamos a enfrentar entre países y nos vamos a ir eliminando hasta llegar a la gran final que es el 4 de noviembre. Quizás no pasamos en el futbol, pero en el vino si podemos dar una buena pelea para llegar a la final.

¿Qué les dices a quienes opinan que los concursos sólo sirven como mercadotecnia y que las medallas sólo son un buen pretexto para aumentar los precios de sus mejores etiquetas?

En Casta de Vinos te puedo decir que hemos tenido un solo aumento en nueve años en vinos súper premiados como Casta tinta Syrah que es un vino que ha ganado premios en Bruselas, en Burdeos, en Londres y en Madrid. Aquí hay una cosa, el precio que marca la bodega suele ser muy accesible en relación a la calidad del vino, pero no podemos controlar que el último eslabón de venta, que usualmente es el restaurante o el hotel venda con la política del 3 a 1

En el caso de CASTA las medallas no son para mercadotecnia ni para subir el precio de nuestros vinos, sino para mostrar al consumidor mexicano que tenemos una consistencia de calidad. Para eso es para lo que entramos a cata a ciegas con jueces internacionales, con otros paladares y otros criterios de calificación, para saber que vamos por el buen camino, como hasta la fecha lo hemos hecho.

Casta de Vinos es una vinícola de autor que no produce más de 3,000 cajas anuales. Año tras año va subiendo la producción en la medida que nuestro presupuesto y nuestra capacidad nos lo permite. Nosotros nos enfocamos netamente en crear vinos de calidad, la verdad no ocupamos el enoturismo como una segunda vía de ingresos, porque tenemos el focus en crear buenos vinos y no queremos desviarnos del camino. A largo plazo seguimos con la firme intención de mantenernos como vinícola de autor y no rebasar la producción de 6,000 cajas al año.

¿Cuál es el papel de la mujer dentro de la industria del vino mexicano?

Somos pocas las mujeres que estamos en este ámbito de la producción del vino mexicano, pero creo que el aficionado del vino, el enófilo, no esta volteando a ver si el vino  lo hace una mujer o un hombre, simplemente le interesa que el vino este bien hecho.

La verdad es que a la fecha, yo no he sentido ningún tipo de machismo o discriminación porque nuestros vinos sean hechos por mujeres, lo que sí te comento es que al principio, cuando nos presentábamos en lugares masivos, la mujer si era la que  tenía un poquito de recelo, lo que menos esperarías, pero a final de cuentas, una vez que te escuchan, que entienden el concepto y la filosofía de la vinícola y sienten la pasión, de nuestros vinos, todo eso pasa a segundo plano.

¿Algún mensaje final para los lectores que todavía no conozcan los vinos de Casta de vinos?

Que le den una oportunidad al vino mexicano, que le den una oportunidad al vino de Casta de vinos, creo que vamos muy bien, pero necesitamos más apoyo para lograr que al llegar a un restaurante la gente pida un vino mexicano antes que un español, un argentino o un chileno.